Por Mariana Merlo
Primero fue “Cristina en el país de las maravillas” y ahora “Danza con Cobos”. Desde que se volcó a la política, Nito Artaza no tiene ningún pudor en titular sus obras revisteriles con juegos de palabras que involucren a funcionarios en ejercicio. En la primera lo acompañaban Marcelo Polino, Cacho Castaña y Luciana Salazar.
Actualmente, en el espectáculo que tiene en cartel en Mar del Plata, optó por las curvas de una morocha: Pamela David. “Cuando me llamaron de la producción, no sabía que mi papel era el de la figura femenina, pero la verdad es que tenía muchas ganas. Cuando me enteré, pensé: ‘epa, tengo una responsabilidad importante’. Era volver a las plumas y tenía que prepararme bien para estar a tono con el espectáculo, Nito siempre hace cosas increíbles, y si no estaba capacitada iba a desentonar”, confiesa una Pamela.
¿Pamela David haciendo de la ex mujer de un ex presidente? Probablemente no hubiera recibido el papel para hacer de la chilena de estar en las compañías de la competencia, que de manera deslumbrante intentan ser lo más vedettísimas posible, evitando la actualidad –salvo la relacionada con las peleas mediáticas del mundo del espectáculo–. Es más, David también se pone en el rol de psicóloga que analiza al matrimonio Kirchner. “Es todo con mucho respeto”, se ataja.
Pamela fue convocada por un ex candidato a diputado de la Unión Cívica Radical, que reconoció públicamente que el nombre del espectáculo está íntimamente ligado a la votación de Julio Cobos, el vicepresidente de la Nación, contra las retenciones del campo. “Le hubiese puesto el mismo nombre por más que no tuviera la afinidad política que tengo con él”, el hombre que le presta el apellido al show, ya prometió ir a verlo, aunque por ahora se hace rogar.
Con treinta años, tiene un hijo de dos y está casada con un jugador de básquet, Bruno Lábaque. Después de un año de hacer televisión, retomó las plumas y el conchero, una cuenta pendiente desde la época del primer “Bailando por un sueño”. Pero como dice ella, “lo de Nito se me dio sin estar golpeando puertas ni con ningún título diciendo: ‘quiero volver a las plumas’, entonces vamos a esperar que la vida me siga sorprendiendo”.
–¿Cree que el éxito de la obra es reírse de la actualidad del país?
–No, creo que Nito es un clásico de Mardel. Es como preguntar si fuiste a la playa. Estás en Mar del Plata, vas a la playa y a ver a Nito Artaza. De ahí en más, el “de boca en boca” también es muy importante, más que la prensa, incluso. Cada día estamos teniendo más espectadores.
–¿Cómo le cayó a su marido que vuelva a las plumas y el conchero?
–Mirá, estando con él hice “Interviú” y “Playboy”. La “Interviú” la hice después de tenerlo a Felipe, y ahora voy a volver a hacer la “Playboy”, que ya me hizo la propuesta. Lo que más afectó a Bruno fue el tema de la distancia, él en Córdoba y yo en Mar del Plata. Él pensaba que yo no iba a trabajar en el verano, pero sabe que era una oportunidad única y que no la podía desaprovechar.
–¿Está confirmado “Playboy”?
–Sí, ya dije que sí. Hay que ver cuándo la hacemos por una cuestión de tiempo. Hasta ahora, el mío sigue siendo el número más vendido, aquel que hice en marzo de 2005. Es un desafío, me tengo que ganar a mí misma, soy la que más vendió, está bueno eso, que me tengan en cuenta de nuevo y más sabiendo que ninguna otra repitió.
–No fue botinera, no se vieron videos caseros suyos, nunca se caracterizó por los escándalos. ¿Es la anti-vedette del siglo XXI?
–Sí, totalmente. A veces no tengo tiempo de hacerme las manos, me ves en el camarín tomando mate con las costureras. Soy definitivamente la anti-vedette, o la anti-diva. No sé si está bien o mal, pero soy así, soy una laburante.
–¿Entonces en 2009 queda descartado el tema de agrandar la familia?
–Sí, descartamos. Quizás en 2010 nos ponemos a escribir la cartita a la cigüeña. La verdad es que Feli también demanda mucho y no es cuestión tampoco de meterme en camisa de once varas, quiero disfrutar estos momentos de Felipe también.
http://www.elargentino.com/nota-28608-Pamela-David-La-primera-dama-de-las-plumas.html
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