Casada desde hace tiempo con el basquetbolista Bruno Labaqué, la vedette confesó que la rutina familiar no frena su ímpetu en la cama. "Es muy celoso, pero bien que le gusta verme como Dios me trajo el mundo!", dijo en relación a las producciones que hace para las revistas.
Pamela David se encargó de demostrar que aún depués de haber dado a luz, se puede seguir ratoneando a los argentinos y, en especial, a su marido.
"Ser madre me hizo adicta al sexo. Algunas noches espero que se duerma Felipe (su hijo) y me disfrazo de colegiala para Bruno", contó la vedette a la revista Gente sobre las sorpresas que le prepara al basquetbolista Bruno Lábaque a su vuelta al hogar.
"Desnudarme, mostrar mi cuerpo y seducir jamás fue un problema. Soy así. No tengo falso pudor, justamente porque separo bien las cosas. El escenario y la vida real no se mezclan", reveló Pamela.
En el reportaje, la vedette confesó que no le costaba hablar de su vida privada pero que, después de su paso por el reality El Bar, tuvo que demostrar que era "algo más que curvas".
"En una etapa desnudé mi cuerpo y mi vida íntima porque era el camino de la fama", aceptó. "Pero ahora puedo elegir mi trabajo y dedicarles más tiempo a mi marido y a mi hijo".
La morocha destacó que Bruno Lábaque, su marido desde algunos meses, "es muy celoso y fogoso" pero que le encanta verla como Dios la trajo al mundo. "¡Y bien que se ratonea! Total, sabe que ese cuerpito es de él", concluyó la vedette, según publica El Argentino.
http://www.mdzol.com/mdz/nota/78547-Pamela-David-Ser-madre-me-hizo-adicta-al-sexo/
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